miércoles, 11 de septiembre de 2013

Ruta del Contrabando (II)


 2ª ETAPA: 3 de septiembre, Igualada-Solsona


Montserrat en el mar...
Un día más fresco que el anterior, pero soleado. Después de desayunar algo y de la protocolaria foto con la peregrina alemana, la despedida (pero qué maja! espero que haya llegado a Montserrat...).

Con las botas puestas a subir a subir para salir de Igualada, dirección norte. el dolor de la rodilla persistía, por lo que la primera ascensión del día me la tomé con calma. Poco a poco el paisaje iba cambiando, campos de trigo por bosques de pinos e intercalados, molinos de viento, pero no como los que vislumbraba Don Quixote!

Aunque el cuerpo entraba en calor, había un airet molt fí (verdad Seu¿?) que te dejaba tieso. Se notaba sobretodo al cruzar la Serra de les Maioles, donde se encuentra situado el Parque Eólico Serra de Rubió. Justo en el Coll se cruza el GR-7 con la BV-1031, carretera que seguiremos hasta Solsona (mirando con posterioridad el recorrdido del GR-7, pude comprobar que realiza un trazado paralelo al que hice yo, siempre evitando entrar en la transitada C-1412a, aunque luego volveríamos a coincidir mi ruta va mucho más recta...). Una vez arriba ya se podía ver el pre-Pirineo, etapa de mañana y de pasado, y escondido nuestro destino de hoy, Solsona. Ver lo que te queda por delante es algo mentalmente muy duro, pues sabes que todo lo que gastes estos días no lo tendrás los demás...

Hasta Prats de Rei, todo bajada. Paradinha en la torre medieval de La Manresana y parada aun mayor en la villa para comprar algo de comida que después de Calaf, tan solo un desierto me separaba de Solsona... A la salida de Prats, una bonita rampa del 14 %. Intercambio de saludos entre biciclistas (me vio sufrir de lo lindo).

Un corto descenso para salir de Calaf, seguido del alto de Aleny que empalmaba después con otro largo descenso, pasando entre las  Serra de Sant Miquel y la de Montaner donde los kilómetros volaban... hasta el cruce de Pinós! No se qué porcentajes tienen esas rampas, pero iba con todo metido. encima eran dos subidas muy duras: una antes de Pinós; y la otra para llegar a su ayuntamiento.

Abajo Solsona, arriba el cielo...
Se hizo la hora de comer y se agradeció! Al final de la subida, y con las vistas de días venideros, da qué pensar... ¡¿en qué cojones me he metido!? Otro largo descenso, salpicado de algún tobogán, hasta Su. Pasando El Miracle ya se vislumbraba Solsona, pero como el GPS me ayudó mucho el día anterior, pues le hice caso y me metí por el camino marcado... maldita la hora!!! Ya que dejé el GR-7, una pista asfaltada hasta la capital del solsonés, por un sendero pedregoso de bajada... con las alforjas y lo cagao que soy yo encima! Lo pasé mal, pero no tanto como circulando por la A-2.

Do you want to help me?
Aun así, creo que la ruta mereció la pena, tuve la ocasión de cruzar un rió enfurecido, salvaje, indomable, de aguas bravas o, como dicen por estas tierras, Aigüesvives. Era un torrente de una distancia considerable -unos 3 metros- que llevaba un caudal increíble para la época del año -la lámina de agua oscilaba entre los 10 y 20 centímetros- por lo que casi me veo arrastrado por la fuerte corriente!!! Me dije, ¡qué demonios!, vamos a cruzarlo.

Por fin, después de esta increíble aventura, Solsona. Después de preguntar a un autóctono dónde estaba mi hotel (sep, esta vez era un hotelito...), me dijo que no existía... vamos mal! Tranquilos que al final lo encontré!

Datos de la etapa:
Distancia: 75.307 Km
Vel. Media: 16.4 Km/h
Tiempo: 4.36.12 horas

*

Después de una duchita y una corta siesta viendo La Vuelta, la correspondiente visita a la ciudad. Solsona, mucho más bonita que Igualada, ofrece unas imágenes muy características de una población con historia. Aprovechamos la visita para ir a comprar la comida del día siguiente y tomar la correspondiente bebida isotónica patentada @Medley, birra+aquarius.




 

4 comentarios:

Unknown dijo...

jajajaja ¡cómo me suenan los pueblerinos que te dicen que lo que buscas no existe! El otro día andaba por Santaco buscando una plaza, pregunté a la parroquia habitual de un bar por ella, me dijeron que no existía, ¿y sabéis qué? Era una plaza que se veía desde la misma terraza del bar... Mai s'ha de desistir! Gran crònica, ja espero la III!

Marcos Sanz Ramos dijo...

jjajajaja los autóctonos son la ostia!! #YOquieroSERautóctono

En Santaco... que quillo no¿? pero que los del sector sabadellenco!!!

Unknown dijo...

Es lo que tiene vivir en la capital

Marcos Sanz Ramos dijo...

de pixapins esta barcelona plagada, que asco me dan!!! (allí Zayas tenéis chonis)